UN
MUNDO SIN SENTIDO
Se
ve incierto el futuro
Para
esos seres aborrecibles
Que
perdieron el sentido
Del
uso de su sentido común:
El sexto, que no es el de la intuición
Sino
el sentido de la razón.
Nos
enseñaron, de niños,
La
importancia de cada uno:
Oído,
olfato, sabor,
Tacto y visión.
Para
aquellos que tienen todos
Se
les confiere el de la razón.
Los
que gozan de los cinco
No
siempre tienen razón.
Los
explotan a su favor,
En
pos de ganar una guerra;
Estrategas
y estrategias
Planificando
dolor.
Éxtasis
con hedor a pólvora
Y
el enérgico estruendo
Cuando
toman el fusil,
Y
sin interesar el blanco,
Jóvenes,
viejos, embarazadas,
Jalan
del gatillo y tiran con entusiasmo.
Exterminio
sanguinario,
Campos
de concentración,
El
holocausto fue el horror
Para
los que vieron morir
A
sus hijos, a sus padres
A
los amigos y vecinos.
Cuerpos
inertes y degradantes
Con
la identidad perdida,
La
anatomía podrida,
Arrojados
como carroña
En
una fosa común
Sin
la estrella de David.
Hubo
supervivientes,
Sara,
Josué, Moisés y Raquel,
Disgregados
por el mundo,
Errabundos,
muertos vivos,
Llevando
en sus corazones
El
estigma de ser judíos.
Concluyeron
los cuarenta
Más
llegaron los sesenta
¡Cuidado,
hombres amarillos!
Ahora
vamos por Corea, sin olvidar a Vietnam.
Cruentos
avances urdidos por el imperio,
Tierras
sembradas de miedo…
Los
jóvenes de los setenta
Manifestaron
su impotencia
Ante
tanta prepotencia
Regalando
flores con esencia Pachulí.
Eran
los sucios mal vistos
Escupiéndole
la cara a la ilustre sociedad.
Pero
los hubo aquellos
Que
no quisieron más divisiones,
Esgrimiendo
su capacidad para recobrar el sentido:
Músicos,
poetas, actores,
Universitarios
y escultores,
Transitaron
similares destinos
¡Desaparición
o exilio!
Así
aconteció el siglo Veinte:
Sesenta
años violentos
Con
una tregua de treinta,
Cada
quien con su versión:
-
Que algo habrán hecho.
-
Que USA tiene razón.
No
se contentaron los opresores
Con
haber desolado a América.
Hicieron
un pacto con Europa:
Irak,
La Guerra del Golfo,
Las
Torres Gemelas, Bin Laden…
En
el nombre de la paz
Se
adueñaron del petróleo.
¡Fueron
tantas las aberraciones!
Bloqueos
económicos,
Manipulación
de la naturaleza,
Imposición
de su bandera
Izada
en tierras ajenas.
Greenwich
despierta del letargo
Y
los mira de costado.
Queriendo
quedarse con todo
Se
están quedando sin nada.
Agoniza
el sueño americano,
La
clase media se ahoga.
Y
entre tanto desconcierto
Están
soldando el cajón
Del
imperio americano.
Parece
que el sexto sentido
Toma
protagonismo;
La nueva generación monopoliza la razón
Hermanados
en un sólo rugido
¡No
más olvido ni perdón!
Octubre
de 2011 (El mes de la ceguera)